La industria papelera ha advertido al Gobierno de que las nuevas tasas energéticas, en concreto el céntimo verde al gas para generación y para consumo y la tasa a la cogeneración, perjudicarán su capacidad exportadora, según ha explicado hoy la patronal Aspapel en un comunicado.
Las empresas papeleras han considerado que estas tasas ponen en riesgo los 100.000 empleos del sector (17.200 directos y 85.000 indirectos) y han denunciado el efecto de deslocalización que puede generar.
Por ello, Aspapel espera que en el trámite parlamentario se introduzcan enmiendas, de modo que la reforma energética “no dañe” el tejido industrial de este sector.
El sector papelero utiliza la cogeneración como la solución más eficiente a sus necesidades energéticas y como herramienta de competitividad, ya que actúa como palanca de desarrollo industrial y barrera a la deslocalización. El gas natural supone el 63 % de los combustibles utilizados por el sector (el resto es biomasa).
Este sector exportó el pasado año el 62 % de la producción de celulosa y el 48 % de la producción de papel, fundamentalmente a otros países de la Unión Europea.
Así, el sector exporta 3 millones de toneladas de papel, prácticamente el doble que hace diez años, y 1,2 millones de toneladas de celulosa, un 50 % más de lo que exportaba diez años atrás.
Estas exportaciones de papel y celulosa permiten al sector capear la caída del consumo en el mercado interior, han dicho.
Aspapel ha reconocido la necesidad de plantear una reforma energética y de resolver el déficit eléctrico, pero ha indicado que “no puede hacerse a costa de mermar la competitividad de la industria”.
“La reforma energética debe tener como resultado un sector energético al servicio de la industria y no una industria al servicio del sector energético”, ha apuntado.
Fuente: EFECOM